martes, 6 de mayo de 2008

Mis alumnos del “Taller de desarrollo del pensamiento lógico y creativo”, me han hecho puntualizar, a modo de síntesis, algunas prácticas que no sólo empleamos en ese curso, sino en cualquier otro que pretenda ayudar a nuestros alumnos a ser más creativos en la solución de problemas. Aquí están:



ALGUNAS FORMAS DE DESPEJAR NUESTROS OBSTÁCULOS MENTALES EN CLASES


1. No usemos la expresión, “Esta es la respuesta correcta”. Dejemos que los alumnos(as) la encuentren…, ¡si es que hay una sola respuesta! Idealmente los problemas a los que deben enfrentarse los aprendices, deberían tener más de una respuesta posible. Es importante que los alumnos(as) reflexionen, hagan insinuaciones, den más de una respuesta.

2. Desterremos los enunciados, “Esto es obvio” y/o “Eso no es lógico”. Obvio significa “que se encuentra o pone delante de los ojos”, viene del verbo “obviar”, evitar, “apartar de en medio de obstáculos”. Una vez que – como profesores, o futuros educadores - hayamos construido andamios para la construcción del aprendizaje del alumno o hayamos quitado los obstáculos, pregunte – si es necesario – “¿te parece obvio, ahora?” Preferiríamos decir: “¿Lo puedes ver más claramente, ahora? O, ¿qué te parece? ¿Qué piensas?
No todo debe ser lógico (¡lógico!). Además, los estudiantes, ¿pueden ver la o las “consecuencias naturales” de un fenómeno que estamos explicando (o ellos, investigando) de la manera como lo vemos nosotros? Pídales que usen una metáfora, por ejemplo, ésta mejora la lógica.
En síntesis, idealmente, tratemos de evitar en la comunicación con los alumnos estas expresiones, pues presentan una gran carga negativa debido a sus múltiples usos en forma despectiva, de reproche, reconvención (tipo sermón), humillante o irónica, por parte de muchos profesores.

3. ¿Es realmente necesario en todos los casos que los alumnos(as) “sigan las instrucciones al pie de la letra”? En muchos casos, no. Limitemos esta instrucción para cuando sólo realmente sea necesario. De otra manera, hagamos el intento de analizar con nuestros estudiantes qué sucede si se rompen las reglas. Así los estaremos ayudando a ampliar y a mejorar su creatividad.

4. Dejemos que los alumnos usen su imaginación y fantasía. Tratemos de no apurarlos en sus reflexiones, planteamiento de interrogantes o respuestas. Deben sentirse libres para inventar, crear, innovar. No los interrumpamos diciéndoles que sean “prácticos”.


5. ¿Hasta qué punto la ambigüedad puede considerarse una limitación o debilidad? En algunos casos, especialmente cuando queremos que nuestros alumnos(as) se expresen libremente y deseen innovar, es importante encontrar otras respuestas. El término “ambiguo” o la expresión “eso es ambiguo” generalmente connotan imágenes de regaño. No obstante, “ambiguo” significa “que puede entenderse de varios modos o admitir distintas interpretaciones”. El pensamiento divergente, entonces, debe admitirlo.

6. ¿Por qué los alumnos – en general - piensan que equivocarse o cometer errores es un acto vergonzoso? ¿Es posible que un profesor los haya ridiculizado por sus errores o haya permitido que sus compañeros se rieran de ellos? Es lo más probable. Sin embargo, no hay progreso sin errores o equivocaciones. Los aprendices deben ser convencidos que se obtienen nuevas y grandes ideas de los errores.


7. La sala de clases debería ser un lugar de entretenimiento que gire alrededor de temas interesantes. Por lo tanto, no digamos que “jugar es mera frivolidad”. Nosotros mismos, cuando nos hemos convertido en alumnos nuevamente – comúnmente en cursos de perfeccionamiento o al seguir programas de postgrado -, queremos “pasarlo bien”, ¿cierto? Entonces, ¿por qué negar esa posibilidad a nuestros propios alumnos(as)?

8. Si ante una consulta de nuestros estudiantes, encontramos que no sabemos la respuesta, no la inventemos ni digamos “lo siento, esa no es mi especialidad”. Invitémoslos a averiguar juntos la información para después, ayudarnos mutuamente a construir el conocimiento.


9. No seamos parte de esos profesores que se lamentan diciendo que ellos no quieren hacer el ridículo. Seamos histriónicos o exagerados, a veces – tal vez, muchas veces en nuestro campo – el fin justifica los medios. El fin que sea que nuestros alumnos aprendan, ¿los medios? ¡Todos los que sean necesarios! Mientras más estrategias creativas y fuera de la rutina utilicemos, tanto mejor. La rutina es latosa, fácil de olvidar. Lo ridículo es novedoso, difícil de olvidar.

10. Por favor, no sea de aquellos que se quejan diciendo “no tengo creatividad”. Todos somos creativos y tal vez nuestra mayor creatividad esté expresada en la forma en que hemos construido nuestra vida. Este hecho significa que hemos generado muchas ideas en nuestra existencia. Sigamos, entonces, creando nuevas ideas junto a nuestros alumnos.


Todas las sugerencias anteriores pueden ser utilizadas en cualquier método que usted y sus alumnos elijan trabajar en la sala de clases o en ambientes de aprendizaje diversos.

16 comentarios:

Gabriela Carvajal Vargas dijo...

GABRIELA CARVAJAL VARGAS
Al leer este articulo inmediatamente me acordé de mis tiempos de colegio, cuando cursaba 1º y 2º medio; tal como se menciona en el texto existen muchos profesores que realizan las clases prácticamente como si se tratara de una verdadera misa perfectamente estructurada y todas de la misma forma.Tal como menciona usted en el presente articulo es una realidad muy triste pero que ocurre y yo pienso que sucede porque hay muchos profesores no escogieron esta profesión por verdadera vocación ya que no les interesa si los niños aprenden o no, solo les interesa pasar la materia o de cierta forma "entregar el contenido" y luego recibir un sueldo sin importarles si fue aprendido por los alumnos.
cuando estaba en 3º y 4º medio esta realidad cambio y efectivamente puedo decir que los alumnos principalmente los niños mas pequeños aprenden mucho mas de la forma didáctica en donde el profesor los hace parte de la clase y los integra a través del aporte de sus propias ideas, experiencias o ejemplos. Existen muchas actividades en donde los mismos alumnos pueden ir elaborando la clase y aprendiendo a través de sus mismos compañeros o incluso de lo que ellos mismos van construyendo con sus propias formas de aprender.Me parece que este articulo contribuye mucho en la formación de nuevos profesores como es el caso de nosotros.La lectura de este articulo me permitió concluir que un buen educador no es aquel que pasa y pasa materia o que habla y habla de un tema, por el contrario el buen educador es aquel que se preocupa del aprendizaje de sus alumnos , aquel que se detiene cuando uno de ellos no comprende, aquel que busca diversas formas de aprendizaje."Ese si es un buen educador."

Anónimo dijo...

Con respecto al punto Nº9 siento que tiene gran verdad cuando dice "La rutina es latosa, fácil de olvidar. Lo ridículo es novedoso, difícil de olvidar.", ya que, en los cuatro años de enseñanza media tuve tres profesores distintos de la asignatura de Historia y Ciencias Sociales la cual me desagradaba mucho por el modo plano y cuadrado de uno de ellos (el cual fue mi primer profesor del ramo en la enseñanza media) debido a que siempre nos hacía leer ,hacer un resumen y una línea de tiempo .Sin embargo el tercer profesor del mismo ramo que tuve siempre nos deleitaba o hacia reír dando su clase ; él muchas veces representaba sucesos históricos , hablaba  con pasión , se subía a la silla o la mesa ejemplificando lo que quería decir junto a todo eso y aunque sea difícil de creer cuando me encontraba rindiendo una prueba de historia   al leer una pregunta recordaba lo que él hizo en el momento que explico esa parte de la materia y de igual forma  puedo decir  que también  cumplía  con la expectativa que se plantea en el punto nº7 en que los alumnos

Anónimo dijo...

esperamos no aburrirnos en las clases sino entretenernos , gozar del aprender y quedarnos con el gusto de decir "me gusto la clase , es genial el profe ó fue interesante de lo que hablamos" y luego darte cuenta que también aprendiste .
                         Ese es el comentario, mi nombre es Ingrid Farias Suárez  del 1º año de Pedagogía Química

Anónimo dijo...

Este texto dice muchas realidades, que nosotros como futuros profesores debemos evitar, como por ejemplo: el teer verguenza de presentarse delante del curso por el miedo a las burlas, no lo realiza, esto se debe esvitar desde que el niño comienza su enseñanza, ya que queda con ese "trauma" para toda su vida educacional.
En general todo lo que se expresa en esta reacción está diciendo la verdad, que todo ebría ser dinámico, evitar la monotonía que se tenía antes donde el profesor era el único emisor y los alumnos lo único que pueden hacer es recepcionar la información que se les está dando. Ahora no, eso debe ser que as dos partes de la clase tanto profesor como alumno deben participar de las clases para así los dos asistan a estas de una manera más disponible.
En las clases se debe realizar de todo, ya que así es la única forma de aprender y sentrise "realizado" de las actividades u objetivos propuestos para la clase. Cuando me refiero al "hacer de todo" es sobre los métodos, tecnología, y por sobre todo usar mucho la creatividad.
Finalmente, todas las sugerencias expuestas se deben tomar en cuenta, para así ser un profesor inegral y también cumplir con uno mismo y con sus alumnos.

Lili dijo...

De niña me llamó la atención el rol del profesor y lo importante que era cada vez que me evaluaba en alguna clase o exámen, pero jamás imaginé que el ser profesor tenía un trasfondo tremendo, un modo de ver la vida en comunidad y en equidad para sus alumnos. ¡Claro! he recordado que cuando niña me marco mucho que un día en clase de matemática, tuve que salir a la pizarra a resolver un ejercicio de geometría, me puse nerviosa y no lo supe hacer, pasé una verguenza tremenda y para la profesora quedé como la niña que no supo resolver el problema lógico y obvio. Desde entonces mi gusto por la matemática no es por tener la habilidad sino por lo que me esfuerzo en comprenderla, tal vez esa profesora si hubiera leído este artículo, hubiera evitado esos obstáculos mentales, de "no poder", a mí y a mis compañeros, cada vez que salíamos a la pizarra y de enfrentarnos a situaciones nuevas y díficiles. Por consiguiente, qué delicado es trabajar con personas y sobre todo con niños que con curiosidad y a veces con temor, abren sus ojos para descubrir lo nuevo, y es entonces la labor del profesor para guiarlos y decir ¡ vamos que tú puedes! y no inferiorizarlo. Espero que mi experiencia me ayude a que sea una buena profesora y apoyar a mis alumnos, ser creíble y confiable. Gracias por recordarmelo.

Anónimo dijo...

Este texto me recordo mucho a mis profesores tanto de basica como se media, estoy muy de acuerdo con todas las estrategias dichas en el texto, de hecho muchas de ellas seran utilizadas cuando sea una profesional, ya que haré algo distinto que hicieron mis profesores conmigo, creo que mi inseguridad frente a estar delante de personas como lo dice en un punto del texto, el riculizar a los alumnos me a pasado a mi, y me pasado muchas veces con distintos profesores, por esto mismo y porque me a costado superarlo creo mucho mas en estas estrategias y en que los educadores tengan un cambio, pero creo que esto puede cambiarse solamente con los profesores con vocación.

peg. básica rural

María José Meneses dijo...

María Jose Menes
Ped. en Quimicas y Ciencias

Bueno al leer su texto comprendi inmediatamente porque me aburria en clases, y la respuesta fue muy simple es porque la rutina acaba con todo, aparte de la rutina era porque los profesores al enseñarte algo su respuesta a cualquier contenido era verdadera, es decir no habia derecho a la duda ni a plantear tu respuesta alternativa a dicha pregunta, bueno en cierto modo no muchos podiamos dudar de lo que el profe nos enseñaba porque ellos son "lógicos", y si ellos lo decian es cierto no hay de derecho a dudar , bueno si dudabas quedabas en ridiculo porque los profes, bueno algunos suelen dejar en verguenza a los alumnos, situación poco agradable para la persona afectada, bueno yo le contare que personalmente dudaba mucho de una profe que tenia, ella hacia clases de castellano cada vez que terminab a la clase yo salia de la sala a preguntarle a mi profe de historia si estaba correcto lo que mi profesora de castellano me enseño y en muchas ocaciones se equivocaba entonces creo que no hay situación mas fastidiosa que eso dudar de la persona que te esta enseñando, para una buena educación tiene que haber factores fundamentales y una de esos en la confianza, esto abarca mucho como por ejemplo confianza para ser libre y dar tu respuesta sin temer a la verguenza,al profesor sentirse còmodo y poder hacer " el ridiculo", aparte de lo ya comentado creo que una manera eficaz que los alunmos aprendan es que ellos experimenten, pero ojo nosotros como futuros profesores ayudarlos para que sientan la seguridad, no dejarlos solo.
La creativida es muy importante porque así nuestros futuros alunmos aprenderan de una manera mas divertida y así estaran mas tiempo concentrados, no digo la clase entera porque lo veo muy dificil ya que yo me concentrada con suerte 10 minutos, entonces una persona que se esta preparando para ser educador nunca tiene que olvidar como fue su educación en el colegio y asi no volver a cometer los mismos errores y de esa manera poder mejorar la relaciones humanas y por sobre todo la educación.
Los alumnos no iran al colegio a sentarse ni a aprender materia ellos tienen que ir a aprender de la vida, de las cosas que ocurren no hay que enseñarles biologia hay que enseñarle la grandeza del cuerpo humano, siempre hay que hacer las cosas por amor y con amor asi nuestras clases serán mas entretenidad, creativas y por sobre todo quisas así se logre el objetivo de ser profesor " enseñar, no pasar contenidos"
Bueno ese a sido mi comentario profesor comentarle de punto aparte que hay ciertos momentos en la vida que son muy dificiles y a veces hay que saber apoyar al otro...y eso tiene que hacer una buena persona.

Anónimo dijo...

Su estudio me hizo recordar las clases que alguna vez tuve en la media, cuando yo estaba en primero medio en un colegio que solo hice ese curso, donde tenia un profesor que tenia una forma muy particular de hacer su clase de física. Él llegaba a la sala y pasaba lista, y luego comenzaba a hablar sobre cosas que él hacia, como por ejemplo, que el día anterior había salido él en el diario dando una opinión que no tenía nada que ver con física ni menos con educación, eso yo lo tomaba como una forma de vanagloriarse y destacar sus logros. Él, comenzando el año, nos hizo hacer un trabajo de investigación y experimentos sobre las ondas del sonido, con el cual estuvimos literalmente, todo el año escribiéndolo, agregando fotos y haciendo experimentos que él sacaba del libro de física que otorgaba el Ministerio de Educación. Con él no aprendí nada, primero, por su forma de tratarnos, segundo, por su forma de hacer su clase tan monótona, ya que sabíamos lo que íbamos a hablar en clase, “las ondas del sonido”, nunca hubo un cambio, nunca hubo sorpresa ni actividad estimulante para seguir, por lo menos, investigando sobre el tema.
Por el contrario, en segundo, tercero y cuarto medio, que cursé en otro establecimiento, tuve el agrado de encontrarme con profesores que me devolvieron las ganas de prender, debido a su forma de relacionarse con los alumnos, la forma variada que entregaban los contenidos, y las constantes sorpresas que teníamos durante la clase, que mantenían al curso en constante atención e interés por la actividad que realizaríamos durante la jornada de estudio.
Desde esos años pude comprender que una clase no es sólo pasar materia y repetir lo que dicen los textos, y que también había variadas formas de impartir una clase con diferentes formas de explicar los contenidos que son necesarios para la formación de los alumnos.
Su investigación me ha ayudado mucho a aclarar, aunque usted no lo crea, las dudas que tuviera, sobre la forma que yo, como educador y guía, puedo aplicar con los niños, que en un futuro próximo tendré en el aula, de cómo aplicar la materia o contenidos de una manera que ésta, (la clase) no sea una clase tediosa y desmotivante para el niño, sino una clase que sea del agrado del educando donde yo, como educador, pueda usar toda mi creatividad para que mis niños aprendan de una manera diferente y entretenida.

Anónimo dijo...

Despues de leer el articulo uno se va atras un poco en los años y se recuerda de todo lo que vivio.
Bueno en el tema que ahora corresponde hablar me baso en primer y segundo basico que creo que para mi son los cursos principales de desarrollo y aprendizaje a los alumnos , si se da mala esa base nosotros como alumnos nos atemorizamos saliendonos de clases o cuando se asiste se hace con temor, por eso relatare un poco mi vivencia para dar como una especie de conclusion al final.
La señorita profesora en ese entonces era muy autoritaria , ella hacia esto y eso nadie podia decir que no, cuando alguien se oponia no necesariamente con un no, si no que para ella cualquier situacion que no fuera lo que ella esperaba era mal visto otorgando a mis compañeros tirones de pelo9 o fuertes retos.
Ella era autoritaria, por eso nadie participaba, incluso a veces uno como niño no puede estar callado mucho rato y entra en el juego de decir cosas al aire para ver si la profesora da una respuesta a lo dicho, cuando eso ocurria la profesora se enojaba era como que uno le dijera un garabato, era una gran falta, y ahi se ve que no se podia dar una comunicacion, interaccion con los niños, en el unico momento que ella nos dejaba hablar era cuando teniamos duda en la materia. Nos hacia participar si en actividades para desarrollarnos un poco pero eso no servia, como no nos dejaba hablar en cursos mas garndes eso nos perjudicaba debido a que teniamos y sentiamos miedo por burlas o porque lo que deciamos estaba malo.
Por lo tanto puedo concluir que la falta de comunicacion hace a la larga la falta de personalidad para presentar las propias visiones o simplemente el dirigirse al curso en cualquier actividad que se de, concluyo mi trabajo exponiendo que cada ves que se deja en silencion el hablar de los alumnos contribuye a que despues de ellos no hayan expectativas porque en un comienzo fueron callados.

Anónimo dijo...

PROFESOR AHORA SI QUE EN EL ANTERIOR NO PUSE MI NOMBRE


Despues de leer el articulo uno se va atras un poco en los años y se recuerda de todo lo que vivio.
Bueno en el tema que ahora corresponde hablar me baso en primer y segundo basico que creo que para mi son los cursos principales de desarrollo y aprendizaje a los alumnos , si se da mala esa base nosotros como alumnos nos atemorizamos saliendonos de clases o cuando se asiste se hace con temor, por eso relatare un poco mi vivencia para dar como una especie de conclusion al final.
La señorita profesora en ese entonces era muy autoritaria , ella hacia esto y eso nadie podia decir que no, cuando alguien se oponia no necesariamente con un no, si no que para ella cualquier situacion que no fuera lo que ella esperaba era mal visto otorgando a mis compañeros tirones de pelo9 o fuertes retos.
Ella era autoritaria, por eso nadie participaba, incluso a veces uno como niño no puede estar callado mucho rato y entra en el juego de decir cosas al aire para ver si la profesora da una respuesta a lo dicho, cuando eso ocurria la profesora se enojaba era como que uno le dijera un garabato, era una gran falta, y ahi se ve que no se podia dar una comunicacion, interaccion con los niños, en el unico momento que ella nos dejaba hablar era cuando teniamos duda en la materia. Nos hacia participar si en actividades para desarrollarnos un poco pero eso no servia, como no nos dejaba hablar en cursos mas garndes eso nos perjudicaba debido a que teniamos y sentiamos miedo por burlas o porque lo que deciamos estaba malo.
Por lo tanto puedo concluir que la falta de comunicacion hace a la larga la falta de personalidad para presentar las propias visiones o simplemente el dirigirse al curso en cualquier actividad que se de, concluyo mi trabajo exponiendo que cada ves que se deja en silencion el hablar de los alumnos contribuye a que despues de ellos no hayan expectativas porque en un comienzo fueron callados.

vanessa donoso
pedagogia basica rural primer año
sede san felipe

katherine castro dijo...

Son muy ciertos cada uno de los puntos que menciona el profesor y a mí me encantaría analizarlos ya que más de uno me llama la atención: 1- Es muy importante tomar como correcta cada una de las respuestas de los alumnos porque para ellos es muy significativa su respuesta y creo que seria valido nosotros también tomarla con esa importancia. Para un niño es un paso muy grande dar una respuesta delante del profesor y de sus compañeros por miedo al rechazo o las burlas. Ahora en los colegios muchas veces los profesores tienden a opacar las respuestas de los niñas o también decirle a solo un niño que su respuesta es correcta ¿y que pasa con los demás? Piensa el profesor en ese como momento como se siente ese niño que respondió y no le dijeron que su respuesta era correcta ¿Creen que a ese niño le van a volver a dar ganas de responder una pregunta hecha por el profesor?
3- Muchas veces para que las cosas resulten mejor tenemos que romper las reglas a veces el profesor se equivoca y si nosotros seguimos sus instrucciones también nos podemos equivocar por lo tanto si tenemos otra forma de hacer los ejercicios o no se la tarea y esta bien creo que debemos utilizarla así ampliamos nuestra mente y creatividad.
4- ¿Porque cada vez que te dan de tarea hacer una reflexión sobre algún tema te dan un tope de paginas? ¿Porque el profesor no deja que tu imaginación y tu forma de pensar se expresen de la manera que tu quieras? Pienso que es necesario que los niños den su opinión acerca de algún tema y que se explayen como ellos quieran.
5- Cuando un niño viene recién conociendo a un profesor pienso que es importante que el profesor sepa de que manera piensa el niño para conocerlo mejor para ayudarle en lo que le cuesta y no esperar que un niño tenga un rojo en alguna materia para saber que esa materia le dificulta el aprendizaje
6- Este punto esta un poco ligado con el uno ya que muchas veces a los niños les da vergüenza hablar por miedo al ridículo del cual a veces los profesores tienen la culpa, porque los han ridiculizado delante de los demás niños. Es importante saber que muchas veces de los errores se aprende.
7- Es importante que a los niños se les quite el miedo de entrar a una sala de clases, porque claro piensan que se van a aburrir o que el profesor los va a retar siempre; por lo tanto los niños deben entender, el profesor lo tiene que ayudar a eso, que uno también puede pasarlo bien aprendiendo y que las clases también pueden ser entretenidas.
8-A veces los niños tienden a tener un pensamiento errado de lo que es un profesor, el profesor no tiene porque saber todo o siempre tener la razón, él es como un humano mas solamente y si no sabemos un respuesta debemos invitar a que el niños la averigüen y que él nos enseñe para que aprenda a que él también puede saber cosas y aprender solo.
9- Al profesor a veces les da miedo que los niños se rían de los gestos y palabras que dicen, pero a veces una clase fuera de los común llama mucho mas la atención e incuso les dan muchas mas ganas de estar aprendiendo en una sala de clases a los niños y es mucho mas fácil tomarle miedo a un profesor que nunca se ríe o que nunca se sale de los estándares que a un profesor divertido y con una forma mas creativa de enseñar.
10- El profesor cada día va creciendo gracias a la ayuda de los alumnos pero no solo crece de manera profesional si no también en su creatividad ya que gracias a ellos se nos abre más la mente y comienzan a ser mucho más creativos

Anónimo dijo...

Cristian Fuentes
pedegogia en quimica......

Creo que lo que dice los 2 primeros puntos dice mucho y me denuestra que yo estaba es un error ya que todas las frases que de destaco yo en lo personal la utilizaba mucho creyendo que era lo mas correcto pero era al contrario, puede ser interesante verlo desde ese punto de vista, pero solo si si la persona tione (como yo) un forma de pensar diferente a la que ud se refiere, pero creo que si se hace o utiliza de una manera correcta no deberia escucharce como "una forma despectiva, de reproche, reconvención (tipo sermón), humillante o irónica, por parte del profesor" esa es mi opinion.

Anónimo dijo...

Humberto Gutierrez
Ped. en Quimicas y Ciencias

Es increíble ver como tantas y cortas frases pueden ridiculizar o amenazar a los alumnos en el primer punto se muestra la frase “Esta es la respuesta correcta” es difícil de no utilizar pero cuando posiblemente el alumno encontró otra respuesta que puede ser la correcta y tener mas de una respuesta correcta es lo mas apropiado y nosotros darles las herramientas que nesecitan para encontrar una de estas respuestas a su problemas en el segundo punto hay que tratar de no mostrar una negatividad o palabras que puedan ser humillantes y que pueden ser obstáculos para su aprendizajes hay que mostrarle que no todo es lógico sino que ahora se ve mas claramente es lo mas correcto para mi en el tercer se pude ver una gran verdad que no solos los caminos que nosotros conocemos son los correctos el alumno puede encontrar mas de un medio para que llegue a su cometido no hay que cortar la amplia mente que pueden tener este alumno hay que dejarlos inventar y fantasear para que pueda aprender y recordar con mayor facilidad , en el punto seis es una gran verdad que los alumnos creen y hasta yo creo que equivocarse es vergonzoso ya que los profes me pueden regañar y mis compañeros molestarme por que el profe me a retado por equivocarme por mi parte es una limitación que debo superar y la sala de clases no debe ser un lugar de martirio sino un lugar ameno para aprender y ser guiados por nuestros mentores ;débenos ser verdaderos guías para nuestros alumnos o ser amigos de ellos que encontraos juntos una respuesta que pueda ser la correcta y discutirla con ellos debe ser algo muy bueno para el ambiente de la sala de clases y mientras nuestros alumnos no se sientan que están delante de un ser autoritario es lo mejor para que los niños puedan aprender junto a nosotros, y nosotros solo ser un guía de su aprendizaje esa es mi opinión sobre el tema profe bye….

Anónimo dijo...

Creo que todas estas formas de despejar nuestros obstáculos son súper necesarias, para una buena recepción de la materia en nuestros estudiantes, a la vez necesarias para preparar una buena clase y estimular a los estudiantes y para que estos tomen atención la mayor parte de clase, pero creo que uno de los puntos mas necesarios es el de demostrar a los estudiantes que errar es necesario, natural y normal, que es súper necesario para el buen aprendizaje del estudiante y para que exista una armonizad dentro de la sala de clases. Creo que cada una de los puntos mencionados son súper necesarios.

manuel martínez

ped. en quimica y cs.

1º año

Anónimo dijo...

JUAN ESPINOSA LOPEZ
Cuando leí este artículo me sentí identificado pero también me fijo en la carencia con la cual trabajan algunos profesores que tuve en mis años de estudiante (de enseñanza media).
Puesto que los profesores nos daban las respuestas muy fácilmente cosa que era escuchar y anotar pero esas palabras en el papel quedaban y aprenderlas era un cuento aparte en cambio como nos damos cuenta en su clase (por poner un ejemplo claro) uno llega a una conclusión de lo que podría ser la respuesta a su pregunta, lo cual me ayuda a recordar la materia.
En el caso del numero 3 uno se puede equivocar puesto que es humano y el alumno tiene otra visión de la materia, si su percepción es mejor o mas acertada que la del profesor puede que su “rebeldía” sea correcta por decirlo así.

Melissa dijo...

Importante es, que se permita a los alumnos la posibilidad de indagar por ellos mismos un tipo de respuesta, así como también el hilar de manera coherente (en relación a la edad y conocimientos adquiridos previamente por ellos) una respuesta que pueda reflejar lo que entendieron. Lo anterior genera en ellos la capacidad de evaluar múltiples opciones que le permitan solucionar un problema. Utilizando el lenguaje oral apropiado, podemos ayudar al alumno a pensar, investigar y comprobar por sí mismo cada tipo de respuesta que él o ella crea que es la correcta hasta que llegue a sus propias conclusiones mediante las habilidades analíticas que cada persona posee (pudiendo éstas no ser similares a las del resto de los compañeros o a las del profesor. Al utilizar mal el lenguaje e incluso la entonación de las palabras muchas veces, y en particular con los alumnos, se genera temor e inhibición para argumentar o presentar algún tipo de duda frente a una materia determinada.

El facultar a los alumnos, para que realicen de manera no convencional una actividad, produce la confianza necesaria en ellos para inventar, crear o mejorar un proceso acorde a ellos a la vez que se interesan en la búsqueda de opciones que lleven a un resultado que puedan entender. Lo anterior, provoca que los alumnos aprendan y se interesen, más que en el resultado, en el proceso que les llevo a ese resultado (descubren nuevas cosas y se divierten en muchos casos).

Aquellos procedimientos que no llevaron al resultado esperado, se deben orientar al análisis del proceso completo y a la búsqueda de la equivocación sin recriminaciones, sino que con una disposición de aprender o de renovar el conocimiento adquirido para reintentarlo.

Es sabido que las personas, en su mayoría, aprenden más rápida y fácilmente si son ellos mismos quienes descubren el resultado de un proyecto a realizar. Se aprende haciendo, es así como de niños vamos viendo y probando las distintas maneras de hacer una misma cosa con el solo fin de averiguar cual es el mejor procedimiento y el que más se adecue a nosotros.

Podemos, desde el punto de vista de profesores, enseñar a nuestros alumnos a auto-educarse (una vez logrado un nexo entre “personas” de confianza mutua donde profesor y alumnos se fusionen, pasando uno a ocupar el lugar del otro y viceversa) mediante conversaciones amenas y críticas de diversas materias, exposiciones fuera de lo común y participativas, generando un ambiente didáctico y entretenido que logre en el alumno el interés por las clases y sus contenidos.

Se debe romper con la rutina y lo clásico del antiguo procedimiento para educación en el aula. Niños, adolescentes y adultos actuales, están deseosos de aprender, pero el estímulo que genere las reales ganas o intenciones por aprender es lo que los profesores, que están egresando, deben modificar para conseguir clases entretenidas, que sean analíticas, prácticas mas que teóricas, creativas y evaluativas consiguiendo con esto a alumnos motivados por aprender y adquirir nuevos conocimientos.

Sólo debemos recordar como nos sentíamos en la sala de clases cuando el o la profesora únicamente leía una materia determinada, con el tono de voz invariable e inamovible de su puesto de profesor para volver a sentir y pensar que esa clase era demasiado aburrida y solo debías repetir la materia como una grabadora (una y otra vez, sin recordar ni saber claramente de que se trataba) para poder salir a divertirse en el recreo. Asimismo, recordarás a la o el profesor, cuyas clases eran divertidas y relajadas donde casi sin cuadernos ni lápices aprendías los contenidos que se veían en la clase (sentados en el suelo, saliendo de la sala de clases, o contando una historia). Es necesario renovar o buscar nuevas formas de enseñar en el aula si queremos que los alumnos tengan interés en aprender, incluso pidiéndoles la opinión a ellos del tipo de clases que les sería más grata tener en el aula.

“Como profesores nunca dejamos de enseñar, pero debemos recordar que también fuimos y seremos alumnos que debemos aprender”.